Descripción

Este blog forma parte del proyecto narrativo cúentalo todo, bajo la dirección el maestro Sandro Cohen dentro de la materia de Redacción Universitaria del Departamento de Humanidades, División de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma Metropolitana-Azcapotzalco.







sábado, 27 de octubre de 2012

Nudos de la vida

“¿Te gusta Marco?”, preguntó. Estaba un poco nerviosa y no sabía que responderle. Diego me dijo que me quería mucho y que me apoyaría en todo, pero mi miedo no se quitó, así que le dije que no me gustaba.
Al día siguiente para ir a la escuela, me encontré a Marco en el camión. Empecé a platicar con él acerca de la escuela, pero no me quería quedar con la duda de qué habían platicado él y Daniela. Le pregunté cómo estaba la onda con ella y me contestó que la quería mucho a pesar de que no se conocían muy bien.
Antes de que subiéramos a nuestros salones me dijo que yo le gustaba a Daniel. Yo pensé que era una broma, sin embargo, no era así. Me dijo que Daniel estaba enamorado de mí desde que me conoció y que él lo veía bien clavado con migo.
Me quedé en blanco. ¡Qué complicada mañana!

El chico que me gusta me dice que le gusto a su mejor amigo. A mi mejor amiga le gusta el chico que a mi me gusta.
¡Así es! es muy complicado de entender. Mi mañana fue un total nudo y no encontré la forma de desenredarlo.
 Terminando las clases, recibí un mensaje de Marco diciéndome que tenía que hablar conmigo urgentemente. Estaba muy confundida. ¿Qué tenía que decirme él? ¿Será qué yo le gusto? ¿Qué ande con él? … No lo sé.
Me dijo que me esperaba en la esquina del billar. Estaba muy nerviosa, las piernas me temblaban; parecían mantequilla.
Para mi sorpresa él ya estaba ahí. Me invitó un helado y me pidió que nos fuéramos caminando a mi casa. Esperaba que me abrazara o se me declarara, pero eso no sucedió al contrario me dijo que le gustaba Daniela, pero no tanto para andar con ella. Dice que Daniela está muy emocionada, que todo el tiempo le manda mensajes y que es súper tierna con él. Resulta que el joven estaba confundido y qué no sabía que hacer.  Me pidió un consejo y solo le dije que hiciera lo que su corazón le dictara. Él pensó que le iba a decir algo más, pero ¿Qué le podía decir?

Él se fue y me quede un poco confundida. Decidí hacer mi tarea y no pensar en nada más.
En la tarde recibí un mensaje de Daniela que decía: “nena ¿Qué crees? Ya ando con Marco”.

domingo, 21 de octubre de 2012

Ya no es lo mismo

Llegué temprano a la escuela. En vista de que no había mucha gente decidí ir a la cafetería, donde me encontré a uno de mis amigos, Diego. Él siempre ha estado conmigo y ha sido muy buena onda a pesar de que conoce mi carácter y sabe que soy muy explosiva. Él y Marco son los grandes amigos del grupo 602; Daniela y yo, del 607.

Diego me dijo que me ha visto un poco distante, que hace mucho que no platicábamos. Me preguntó si hoy me podía ir a dejar a mi casa, desde luego le dije que sí, ya que yo también tenía que mucho que platicar con él.


Al subir al salón iba decidida a decirle a mi amiga que me gustaba Marco, pero para mi sorpresa Marco estaba platicando con ella. Fue tanto mi enojo que al pasar junto a ellos los ignoré. Sentía que mi temperatura estaba arriba de los cuarenta grados y  solo pensaba  en  la imagen de ellos dos juntos. Daniela muy emocionada entró al salón, se sentó junto a mí, me abrazó  y  me dijo que había platicado con Marco. Él  le había dicho que le gustaba una chava, pero que no sabía como decirle lo que sentía por ella. En ese momento entré en shock, mi mente se lleno de telarañas y la única conclusión a la que podía llegar era que a Marco le gustaba Daniela. No sé… sentí felicidad porque mi amiga había conseguido lo que quería, gustarle a Marco, mientras que yo sufría por dentro.

  Daniela pensó que esa chava era ella. Todo el día se la pasó hablando de él. Yo no veía la hora de salida. Diego me mandó un mensaje para que lo esperara frente de la escuela, así que le dije a Daniela que iba a esperar a Diego, y ella muy segura me dijo que esperaría a Marco. Por fin, después de cinco minutos esperándolos, salieron de su examen. Yo me fui con Diego, mientras que ellos dos se quedaron platicando. En el camino no le puse atención a lo que me decía este chico; solo pensaba en qué podían estar platicando. De pronto me quedé helada al escuchar la voz de Diego...
  

domingo, 14 de octubre de 2012

Detrás de mi sonrisa

Desde muy temprano, antes de ir a la escuela, tenía muchos nervios porque hoy es cumpleaños de uno de mis mejores amigos, Marco. Él me gusta desde que entramos a la preparatoria, pero con el tiempo nos hicimos muy buenos amigos.
Daniela, Victoria, Sandra, Diego y yo le compramos un pastel y algunos regalos después de clases, pero Daniela, una de mis mejores amigas, cuando fuimos a comprar platos y cucharas, me dijo que a ella le gustaba Marco. No sabía qué decirle ni cómo reaccionar; empecé a sentir celos, algo que nunca pensé sufrir, y a la vez un poco de culpa porque no le dije que él me gustaba, puesto que es mi amiga; lo único que se me ocurrió preguntarle fue por qué no le había dicho a Marco, y ella me dijo que no quería perder su amistad, Algo que yo tampoco he hecho por el mismo miedo. Yo tengo más tiempo de conocer a Marco; Daniela y él no tienen mucho de conocerse.
Yo sé que si le digo a Marco que me gusta, él se sacará de onda porque me ha contado muchísimas cosas sobre él y yo le he dicho tantas cosas de mí. Todo el tiempo estamos riendo. El tiempo no corre cundo estoy con él.Todo se suspende y el universo me grita que él es el indicado.El sonido de las aves parece concordar con el de mi corazón, pero hoy no sentí eso al verlo. Al contrario: sentí una culpa inexplicable, nervios incontrolables y traición absoluta  al  ver a Daniela junto a él y saber que a mi mejor amiga le gusta el chavo que a mí me gusta. Él me ve como una amiga, mientras que yo lo veo como algo más. Daniela es una de mis mejores amigas y me sentiré mal si le digo que lo quiero, puesto que a ella le gusta. Sé que ella tiene más posibilidades de andar con él y yo no estaría dispuesta a perder la amistad de Marco diciéndole que me gusta.
 Llegó el momento de despedirnos para darle fin a este día tan complicado. Al momento de despedirnos y darle el último abrazo del día de hoy al cumpleañero, nada me pasó por mi mente; solo disfrutaba el aroma de su loción. No sé qué pasará mañana. Tal vez regrese esa culpa o me decida a decirle que me gusta, poniendo en riesgo nuestra amistad.